Una segunda visita desesperada (Lynnea)

Con manos ligeras se acomodó la falda sobre su regazo, dándose unos segundos para pensar una respuesta a la chica. Había tantas cosas que podría decirles a otras como ella, sin contar que las otras seguramente estarían recibiendo un tratamiento adecuado entre los brazos de sus tíos, tutores, padrinos porque suponía que al ser secuestradas ningún padre habría quedado en pie salvo algunas que recordaba eran hijas de mortífagos... los muy bastardos las habían regalado como si fueran corderos para el matadero para comprar el puesto que luego los metió en Azkaban.

Por un momento encontró una variación en el discurso que sonaba a un intento de dejar de ser un objeto, quizá un poco de esperanza al reconocer un ‘Yo’, una palabra que daba humanidad, egoísta, aun, pero un indicio que a pesar de todo la que se forzaba a ser un objeto era ella misma. Eso no era positivo, al menos la influencia de las runas no llegaba tan lejos y eran reformantes.

"Solo sé sincera. Quizá tarden en responder, a veces cuesta afrontar el pasado de frente, pero seguro que lo harán tarde o temprano. Muchas aun deben pasar su tiempo en San Mungo para tratarse tras tanto tiempo. Solo sé sincera, probablemente si alguien te entenderá serán ellas."

¿Ser sincera? ¿Te refieres a decirles así? ¿Que las extraño? ¿Solo que esta las extraña?.... Respiro moviendo mi pecho, miro como ella se acomoda su falda; respirando más limpia en ese instante tal vez,  y es que al menos esa sensación que a veces me hacía perderme estaba menos ahora; esa sensación que se mesclaba con migo sutil en el momento en que me pedían hacer algo sumisa o dejarme hacer inerte, raspante si pensaba en negarme e inhibidora si lo hacía, como si algo brotara de mi columna para derretirme los huesos cuando decia que si, dejándome en una semi nada casi sin sensaciones por un momento, un momento en el cual solo estaba ahí, sin ni siquiera lo que me dolía; aliviada de todo un instante por muy cruel que fuese lo que viniese después, cuando volvía a sentir todo con un detalle desbordante, pero con mis ojos y piezas adormecidas como si de alguna forma no quisiesen hacer nada distinto tras ese letargo de muñeca.

Yo... supongo que podría intentar; le digo de pronto ahora creo que no tengo eso, en este  momento; girándome un poco casi como si fuese a subir mis piernas al banco, estando con mis manos tocadas entre ellas sobre mis piernas; pensando en eso que podría hacer, pero por dentro también en eso que volvería, en esa sensación con la cual he estado desde hace mucho.

Yo no sabía si le temía o no, pero estaba ahí, era tan sutil, pero estaba ahí mientras me movía, cuando pedían; sin pensarla demasiado por alguna razón, queriendo dejar de hacerlo ahora que lo habia hecho porque quería pensar en ellas, en que podrían hablarme tal vez y es que... y es que solo Espero que las miren al menos.

"Esas son cosas que te deberán contar ellas. Diles que las extrañas y pregunta por ellas. Pregunta si las miran o donde viven. Puedes preguntar y contarles cosas. Como que estás en el colegio y la gente que conociste aquí o lo que haces todos los días." Ofreció algunas opciones sin mucho que decir sobre el tema.

Ella misma la primera vez que tuvo que enfrentarse a otra víctima de abuso no supo exactamente que decirle entre las terapias de grupo que tenían en el psiquiátrico que había sido su hogar durante meses cuando sus traumas habían logrado lo mejor de ella. Lo curioso es que se había quedado sin habla pero había tenido tantas ganas de hablar con alguien que realmente lo entendiera que aun así en la noche buscó la compañía de esa chica para poder hablar lejos de la mirada analítica de los psiquiatras.

Quizá fue la charla que más ayudó aunque el caso de esa chica, Phoenix, no hubiera sido un maltrato tan extremo y había encontrado una forma particular de sentirse protegida.

Ellas... ellas estaban ahí, yo las podía mirar, lo hacía porque era eso o estar ahí tirada; y... nos tomábamos de las manos, a veces nos tomábamos de las manos para poder sentir algo que no nos manchara; abrasándonos cuando hacia frio, o cuando alguna intentaba ayudar a otra recién devuelta... Cuantas veces había sido, cuantas veces alguna de ellas me fue a recoger después de que me violaran y cuantas no; ¿Cuántas veces lo hice yo con otra? ¿Alguna vez lo hice?... ¿Acaso me quede siendo un monstruo y nunca lo hice? ¿O lo hice alguna vez...? Por favor que lo haya hecho alguna vez, y es que porque, porque había sido así con ellas al final; solo porque yo no pude volver algo y ellas si... solo por eso.

¿Y si quisiera eso de nuevo? ¿Estar con ellas y dejar que me miren el rostro como evite en aquella cama blanca? ¿Crees que algún día esta pueda hacerlo? De pronto la estoy mirando fija, esperando su respuesta; esperando algo que le dé un poco de esperanza a la muñeca o algo que la tire al suelo una vez más; y es que ellas... ¿Como vivirían ellas? Ella me lo decía, me hacía pensarlo; me hacia preguntarme como vivían, si las trataban bien, si habían podido recordar, si sus casas eran como antes o si la gente no les gritaba por ser como yo...

"Niniel, eso dependerá enteramente de ti. Si quieres recuperar algo con solo quedarte mirando no alcanzará, si realmente lo deseas, si quieres verlas a la cara y hablarles, preguntarles, esperando que ellas sean quienes den el primer paso se pasará la vida y jamás tendrás tu oportunidad de hablar con ellas. Si no lo intentas, jamás sabrás el resultado."

Bueno, es que todo se reducía a si Niniel se animara a mandar la carta o simplemente sería algo que pasaría para la chica y finalmente se olvidaría en un rincón de su mente. Si lo hacía sería quizá el único progreso que se vería en Niniel desde que empezó el maremoto de Angst de Hogwarts...

Y valga la redundancia quien lo dice.

A veces se sentía que no encajaba, que debía dar unos pasos detrás y comenzar a analizar para ver exactamente que era lo que ocurría, que era lo que le había hecho diferente. ¿Que era eso que la mantenía en pie?

Lo primero que vino a su mente fueron su hija y su hermano. Odie y Mihail eran dos personas muy especiales para ella, no había ni que señalarlo para saberlo, Odette era la luz de sus ojos, ya con 13 años y tras tantos años luchando para una adopción legal que sea aprobada a pesar de su edad, ella había sido desde pequeña la luz de sus ojos, la había criado y cuidado desde el principio y ahora solo podía hacer tanto por ella como seguir buscando como romper la maldición sobre el título que pronto heredaría.

Mihail... Mihail era su traición en carne y hueso. Amaba a su hermano con todo su ser, era todo lo que ella hubiera deseado ser, todo lo que ella hubiera deseado para empezar, pero él era simplemente demasiado despistado. Había tardado más de 13 años en darse cuenta lo que pasó cuando ella desapareció esas dos veces, 13 años hablando de amores, buscándole prometido, tratándola como si él tuviera la razón para sufrir porque Rod no le prestaba atención mientras ella se mantenía firme a su lado.

Y más tiempo tardó aun en comprender ella misma que realmente había una razón para llorar por su inocencia perdida, algo que se dio cuenta cuando Ron la besó por primera vez y supo que no habría inocencia que pudiera ofrecerle en este maltrecho cuerpo.

Amor era lo único que le sostenía, el hecho de seguir amando... pero no sabía como aprendió a hacerlo en primer lugar como para enseñarle a otra persona salvo por indicar que mientras más tiempo se quedara quieta más difícil sería tratar de alcanzar el mundo que seguía girando con o sin su consentimiento.

Sus palabras duelen, me molestan y me enfrían, pero no es porque son agrias como las de ellos; si no porque pienso, porque aunque me siento como una muñeca ella me hace pensar... me hace pensar que será malo si sigo así, en como ellas nunca sabrán que esta las extraña si no lo hago; y es que no se si lo llegare a hacer finalmente, le quiero decir que sí, pero no sé si al final podre hacerlo entre todo lo que me hace intentar borrar mi mente; y ¿Si me equivoco? ¿Y si al salir lo olvido cuando el liquido vuelva a mezclarse con migo? ¿Seguirá doliendo así? ¿Seguirá doliendo así adentro por que las extraño?... Y es que porque, ¿Porque tengo sentir esto?... ¿Porque si me usaron como una muñeca al menos no me quitaron la posibilidad de sentir así por algo...?

Esta bien... lo intentare, no sé bien cómo pero quiero intentar decirles algo; y es que debe haber algo cierto... debe haber algo, algo que decirles después de haber estado ahí. Y es que tenía que haber algo que decir cierto, me cuesta pensarlo, siempre me cuesta pensar que decir; y es que respiro, mi pecho convulsiona siempre cuando apenas puedo respirar, cuando mi mente se nubla por la sensación de haber estado en ese lugar y no piensa... no piensa nada y solo sufre como allá, cuando no pude pensar en que en algún lugar; en algún lugar de esta muñeca estaba la necesidad de decirles algo...

De tener alguien con quien dormir, alguien con quien hablar, una mano que me limpie un poco la piel de las manchas y es que si; a veces lo quería, a veces llegaba a pensarlo y mirando a los otros y dibujándolos; porque creo... no se pero creo que algo de eso me molesta, que quiero que sea como antes, como eso que veo todo los días pero que no puedo tocar porque me duele.... porque me duele demasiado haber estado encerrada ahí; como un pedazo de tela tirado ahí para usar... ensuciándose y pudriéndose ahí mientras solo estaba....

Aunque... Y ella entonces, ¿Que debería hacer esta con ella? La del baño, ¿Debería preguntarle algo? ¿Ir a devolverle esto al menos?... Porque las otras me podrían tratar como ella al saber de mi ¿Cierto?... ¿Cierto?

Ya no sabía dónde estaba mi mirada, si la miraba a ella o bajaba a su lisa falda; y es que si... que iba a hacer si ellas me trataban como ella, me quedaría tirada.... ¿Cuánto más podría llorar acaso?

"No creo que ninguna te haga nada." Sonrió levemente ante el absurdo pensamiento. "Realmente creo que en este instante lo que ella quiere es estar sola. Quizá en algún momento cuando encuentres cual es exactamente tu razón para vivir la comprendas un poco y puedas acercarte a hablarle, no con lo que yo te pueda decir que le digas sino con tus propias palabras. Está molesta porque ella ha hecho el esfuerzo de encontrar una forma de seguir viviendo a pesar de la maldición que carga en sus hombros, ha encontrado motivos para hacerlo por su propia cuenta y no quiere verse a si misma débil ya que en algún momento fue como tu."

Suspiró tratando de recordar todos los records de Solar. La chica lo había hecho a su manera, igual que la misma Lynnea lo había hecho a su manera, Lady Shalott había recurrido a ayuda Psiquiátrica viviendo con la paranoia de constantemente seguir viéndolo, seguir sintiendo sus crudas caricias sobre la piel dañada y el calor de su semilla aun cuando estaba inconsciente. Realmente un instituto mental había sido lo más seguro para ella, un lugar donde no podría entrar sin ser detectado había supuesto aunque sabía que si lo deseaba, si la buscaba, la encontraría...

El único año que se sintió segura fue el año del torneo, pero tras verlo comenzaba a dudar que hubiera estad tan segura realmente.

"Estoy segura que ellas quizá sean las que mejor te comprendan." Concluyó ya que... incluso ella había luchado, Niniel simplemente parecía dejarse ser.

Y sigue molestando, lo que dice sigue molestando de esa forma que es extraña, que me hace pensar; ciento que habla como si fuera mala, como si un tú que es como yo fuera malo... Y es que ¿Porque?... ¿Cómo mas podría ser esta? ¿Cómo mas podría ser si siento así? ¿Cómo mas podría ser así como estoy siempre? Estando como contra una ventana que no me deja salir; volviendo a estar encerrada, encorvándome entera porque tengo esa cosa, esa cosa escabrosa que dejaron ellos en mi piel, dentro de mi cuerpo; siempre con migo, por más que me ponga mis manos, por más que me las pase y pase tratando de limpiarme; tratando de no recordar lo que se sentía estar apretada, ser recorrida, invadida y mesclada con ese algo que siempre me paralizaba para ellos...

Tal vez quería que parara, pedirle que dejara de hablar así de lo que tenía que sentir; como los que estaban en el lugar de las paredes blancas que trataban de hablarme como si fuera mala por terminar sintiendo así; pero yo... no podía y al menos ella misma para al final, siendo buena para detenerse y hablarle a la muñeca de las que si lo deben sentir aun; de las que estuvieron ahí, las que enfriaron ahí con migo en ese lugar.

¿Puedo llorar? ¿Esta puede llorar cuando trate de contárselo? No sé, no sé si pueda no hacerlo...  Es lo que logro preguntarle, parándome de esa banca; sintiendo como esa capa usada escuece ya en mi cuerpo y es que no, yo en verdad no quería irme, no quería volver a la pieza con los recuerdos y esto que extrañaba ahora, iba a doler, sabía que en algún momento iba a doler; pero no sé, ya no sabía si estaba bien seguir aquí o no; sin saber que hacer o sin saber si llegaría ha hacerlo la muñeca al final.

"Puedes llorar, Niniel." Asintió la mujer sin tener realmente mucho que agregar al tema.

Es difícil tratar con gente en problemas, pero Niniel era una persona que no se recomendaría, sino que NECESITABA estar medicada pero nadie se había encargado de siquiera indicarle que lo que le pasaba seguiría doliendo pero que la ayuda estaría a su disposición. Por el contrario, arrojaron un caso como el suyo a manos de una directora que estaba cooperando con su propia desgracia como podía y siendo asistida por una estudiante de psicología que tenía todo el colegio entre sus manos temblorosas e inexpertas, lidiando con una hija adoptiva abusada psicológicamente y abandonada, un hermano mortífago, su propia enfermedad, la enfermedad mental del Wizengammot que no encontraba otra forma de describir lo que ellos hacían.

Odiaba decirlo aun para si misma, pero no tenía tiempo para esta mierda, no tenía como ayudarla más de lo que hacía y si seguía solo con ella como psicóloga y sin medicación adecuada esto no terminaría bien, sería imposible que terminara bien.

"¿Has hecho amigos desde que llegaste al colegio?" Preguntó para cambiar un poco el tema y limpiar el aire.

¿Amigos?... Yo me quedo quieta, delante de ella, mirando hacia el piso; sin poder quedarme con nada en ese instante pero aun golpeada por esa sensación que ahora me molesta y es que, y es que... ¿Te refieres a una persona de aquí que también extrañe? Puede.., puede que tal vez allá una... o varias. Me doy vuelta quedando frente a ella, encogiéndome con las manos tomadas sobre mi regazo; evitando mirar su cara si puedo.

No sé cómo llamarlas pues yo nunca recuerdo como llamar bien a otros, pero su pelo es claro, es un poco más baja que yo y antes la escuchaba en mi lugar a veces, en la pieza donde tengo que dormir y ella... ella una vez estuvo con migo y con ella pude dormir sin que doliera... Aunque ahora, ahora ya no está. Libero un suspiro aunque trato de ocultarlo, y es que había sido cálido y la otra, la otra.... También hay otra, una que se le parece aunque es un poco más alta; una no más grande que yo que me encontró afuera una vez, con una ave pequeña como marca en su ropa; ella... ella descubrió que estuve encerrada, me dijo que ella también y yo.... yo quería, quise intentar contarle lo que se sentía para que fuera como las de ese lugar, pero no pude, no pude del todo... y aunque no me atreví a aceptar su mano... cuando se fue la extrañe, la extrañe tanto....

De pronto estoy con una mano en mi boca, trato de no llorar mas, trato y trato ahí parada; pero creo que no puedo, algunas lagrimas se me escapan; abriendo mis ojos después de apretar para verla a ella; tal vez avergonzada de haber casi llorado de nuevo, pero al miso tiempo queriendo que me vea por si me puede ayudar, ayudar un poco más....

"Pero ella está aquí... podrías ir a buscarla tu misma." Le recordó.

Dos chicas, parecidas, una ya no estaba y la otra aun permanecía, la primera era de Hufflepuff por lo que decía, mientras que la otra era de otra casa y había permanecido encerrada probablemente por mortífagos. Siendo la de Hufflepuff más baja sin ser de primer año la respuesta era fácil, Miss Eisenberg.

La segunda persona en cambio era difícil... había varias chicas rubias y bajas en el colegio, aunque no recordara ninguna de Slytherin, ciertamente estaban aun alguna chica más pequeña de Hufflepuff, alguna Gryffindor, inclusive Miss Lych, aunque por la charla a dos puntas que tuvo con ambas claramente estaba lejos de ser la persona que Niniel hablaba.

También estaba Luna, creía que en algún lugar sobre el informe de ella decía que tuvo un secuestro en época de Mortífagos. Solo esperaba que Mihail, Roderick y Jared no tuvieran nada que ver con eso, le dolería saber que su familia había sido capaz de hacer cosas tan oscuras a personas que apenas estaban aprendiendo a vivir.

"... o incluso mandar una carta a Miss Eisenberg para que venga a visitarte, después de todo pasa bastante tiempo en el colegio, la he visto almorzando entre clases o con la Profesora MacGonagall..." Comentó tratando de recordar esos momentos en que la directora pedía para ver a la pequeña Madison, demasiado encariñada con la diminuta niña que si mal no calculaba, era muy grande para haber salido del cuerpo de la veela.

Pero es que esta no sabe cómo..., no sé cómo hablarle; como podría hablarle tal cual los otros si soy una muñeca y es que no, no puedo contarle más...; necesito que duela menos, que alguien me tome de la mano como allá, lo necesito pero no puedo... Y es que me tortura, me tortura demasiado pensarlo para contarle...aunque, ¿Esta debería hacerlo igual acaso? Inflo mi vientre, tengo las manos en mis hombros, siento el frio, la presión de los ojos ajenos cuando creo que me van a preguntar; haciéndome volver a ese lugar donde no podía iluminar mis ojos y a la tortura, a esa tortura que tanto me hacían ahí...

Y es que me hacia sufrir, pensarlo me hacia sufrir y llorar... llorar tanto como allá y es que yo siempre lloraba, yo siempre quería llorar al comienzo; y es que creo que era una niña, creo era una niña antes de que me metieran ahí... y es que si no, no me dolería tanto ¿Cierto?, no hubiera sentido que ahí no podía respirar mas cuando me acercaba por una mano y es que ella lo había dicho; ella lo había dicho la otra vez... Que si sufría y me dolía era porque no podía ser solo su muñeca, y es que...acaso era una niña antes, una niña a la que le pasaron cosas malas antes de convertirse en esta muñeca...

Me enfría; no puedo contarlo sin que me torture, intentando recordar cómo se debería sentir una niña entre todo eso que me hacían ahí, entre todo eso para lo que me usaban ahí.

Y la otra... no sé, a veces esta; ¿Pero no sé si realmente quiera estar más con esta?

"Mientras más te refieras a ti misma como muñeca más las personas te verán como una..." Comentó en un tono neutral, dejando que decida que era lo que podría ocurrir si la veían como un objeto igual que en aquel lugar.

Era interesante pensarlo realmente. Ella misma había sido tratada como una muñeca. Una muñeca de Trapo, usable, descartable, rota, apenas había sentido en las fracturas de sus huesos y no había sido más dañada solo por su ascendencia banshee, una de las criaturas más resistentes... irónicamente la razón por la cual se moría en este momento.

"A veces contar a otras personas ayuda, a alguien que pueda entender sobre que le hablas, si sientes que puedes hablar con ella hazlo, en estos momentos te encuentras en un lugar seguro, quizá puedas sentirte más cómoda hablándolo con alguien de tu edad o con quien te puedas relacionarte." Eran palabras casi amables aunque Lynnea sabía que no podría ser realmente amable sobre el tema. Lo había vivido en carne propia y Niniel le recordaba demasiado el tiempo que debió tomar para mejorar, para poder hablar, encerrada y lejos de su hermano que no entendía lo que había pasado, solo que su hermana lo había dejado y se sentía solo y algo resentido porque Lynnea no estaría para contarle sobre los nuevos hechizos que había aprendido o para tocar el violín para él.

La primera vez tenía cinco años, ¿que clase de ser enfermo se impone en el cuerpo de alguien tan pequeño? Tan pequeño que no entiende... ¡¿Que clase de padres no escuchan y notan que algo está mal con su hija?! ¿Acaso realmente la adopción le había hecho tan lejana a ellos o acaso era el mestizaje? Porque no se imaginaba a una banshee consintiendo ser impregnada por un humano de buena gana...

¿Sería que las historias se repetían una y otra vez? Quizá... Oddy había llegado para quebrar la racha. Después de todo, la niña si bien abandonada, jamás tuvo que ver la crueldad del mundo manchar su piel.

"Respecto a Eisenberg... quizá si simplemente le preguntas tendrás su respuesta. No conseguirás saberlo simplemente adivinando al azar."

Mientras más te refieras a ti misma como muñeca más las personas te verán como una...

No quiero esas palabras, yo no quiero ser más una muñeca, yo no quería serlo... Pero, pero yo lo digo... ¿Tiene razón? ¿Yo lo digo...? ¿Lo digo? Hablo como muñeca aunque a veces diga que no quiero serlo, ¿Pero porque? Si alguien como ellos se entera, si se enteran de que fui una muñeca porque lo digo ¿Me encerrarían de nuevo? Me torturarían de nuevo y yo no, yo no quiero, sufro de solo pensarlo.... Me mareo, tengo que respirar fuerte mientras mi pecho parece pararse; se que gritaría, que gritaría y patalearía tanto antes de que me amarren y me hagan quedarme quieta de nuevo para ellos... ¿Pero lo hago? ¿No pienso?... ¿Es acaso porque no se cómo ser nada mas? Y es que.., intentar ser como antes duele demasiado después de ser obligada a ser suya por tanto... y yo, yo ya no sé; ella me hace pensar y molesta...

Me siento mal, hacia que no tuviese ganas de moverme al hacerme pensar en eso, pero de pronto me habla con una voz más amable; y yo.. y yo la miro y la vuelvo escuchar. ¿Tú crees que esta pueda hacerlo? Yo.., ella no me hiso nada malo; pero salí corriendo cuando me pregunto si estuve sin luz.., y me puse llorar, detrás de una piedra grande; y ella me siguió, se puso al otro lado, me conto cuanto la tuvieron a ella y yo solo pude responderle cuanto tiempo creí que fue para mí antes de tener que parar, antes de que ambas parasemos... ¿Qué crees que hubiera pasado si ella me hubiese preguntado más? ¿Esta hubiera podido decirle más?

Sigo ahí parada, con mis manos tomadas; ahí sin moverme, sin querer hacerlo como una niña asustada por lo que guarda ante una pregunta amable; paralizada por mi pregunta, lo que sentía y lo que me diría ella; y es que de pronto me sentía tan.. Vulnerable, estaba contando todo lo que había pasado y eso ya me hacia explotar, ese pequeño momento me había hecho llorar... pero también, también había algo mas, algo que me aflige en el pecho cuando llego a pensar en que podría no sentirlo nunca más; ahí con mi pelo seco pasando al lado de mis mejillas.

"Podrías... ¿por que no simplemente te acercas a ella? Quizá de repente contar todo no es lo más cómodo y la idea es que no te obligues o te sientas obligada... Podrías quizá sentarte tu al lado de ella y hablar sobre lo que has hecho en el día. Quizá solo debes esperar a sentirte cómoda para hablar esas cosas con ella..." Ofreció. Es que ya, en serio... si no lo intentaba, no había nada que Lynnea pudiera hacer, estaba fuera de sus manos este caso, era un caso de nivel psiquiátrico y ella no podía hacer absolutamente nada.

Así como en el internado no habían podido hacer nada por ella hasta que ella no comenzó a hacer algo por si misma. Era algo que debía hacer Niniel y que Niniel debía elegir. No había mucho más que decir. Las cosas nunca habían sido fáciles, por lo general si uno quería algo debía tomarlo uno mismo y no esperar a que otro tratara de hacerlo, porque mientras más se sentaban a esperar más tiempo pasarían esperando por algo que quizá nunca llegaría si no ponía algo de su parte...

Por lo que de momento no podía hacer nada más que sentarse y esperar a que ella decidiera avanzar.

"Podrías ir a buscarla, ¿no?" Indicó ya que no estaban en clase los alumnos.

¿Ahora?

Yo la escucho, me propone que valla con ella ahora y yo… no puedo decir que sí, pero tampoco que no; ella me miraría, me pensaría y me hablaría; me hablaría de cosas tal vez me preguntaría de eso y estaría ahí, estaría ahí con migo y yo no podría intentar escapar si quisiera; y es que ¿Porque? ¿Por qué tenía que pedírselo a esta ahora?...

Yo… tal vez sí, pero no sé, no sé si pueda ahora.., Aunque.., creo que esta podría intentarlo... Comienzo mirando hacia la salida de ese salón, haciendo como que voy a dar un paso hacia allá para irme pero no pudiendo hacerlo, sintiendo la molestia de no querer pero tanto el miedo a que me arrepienta de no hacerlo como con ellas si la silencio; queriendo intentar ir con ella tal vez, pero sabiendo lo que podría pasar, lo que podría hacerme querer decir. ¿Puedo traerla a aquí?... ¿O debo hacerlo sola? Termino preguntando, buscando cualquier cosa para no tener que decidirme a enfrentarlo allá sola, como una muñeca sola, esperándola en algún pasillo mientras me pienso sin saber que hacer como ante un espejo, esos espejos que nunca quería ver porque me hacen reconocer a esa que fue manchada por ellos; su cara, sus ojos, su piel, su tristeza o simplemente la forma de lo que era su cuerpo ahí…

"Ambas opciones son posibles si así lo deseas. No me molesta si deseas traerla aquí o llevarla a mi despacho en la biblioteca." Era una opinión profesional, pero realmente no había más que hacer y evidentemente la chica no parecía entender cuando le decía que ya debía marcharse.

Así que se quedó allí, resignada... ya casi era la hora de sus pociones y le gustaba estar acostada en su cama cuando las bebía porque le hacían doler el estómago un rato, la enfermera y los médicos decían que era por sobre exposición a los componentes de esta, que lo mejor era simplemente resistir y evitar meter en su cuerpo también pociones para los dolores.

Bueno, no era tan malo, dolía más si no las bebía en realidad así que una media hora en cama con dolores de estómago no era tan malo considerando las opciones.

"Yo debo ir yendo a mi habitación. Si quieres puedes enviar la Snitch si vas a buscarme para avisarme de antemano que irán allí. ¿Quieres?" Ofreció como un terreno intermedio, sin negarle la ayuda pero sabiendo que necesitaría retirarse al menos por media hora a su habitación.

Esta bien... esta lo intentara a hacer. No estoy segura pero de pronto entiendo que ella ya no quiere tener a esta mas aquí, ahora en este momento, ojala que solo en este momento y eso no me gusta, apenas se como es estar con alguien, intentarlo siquiera; y ahora que había logrado hablarle algo a ella, aunque me hubiesen enviado como una muñeca al comienzo, aunque haya llorado tanto ante ella igual ahora quería estar aquí... Y es que aunque me presionaba aunque me presionaba tanto a veces; también era un lugar donde tal vez podía pensar sin enfriarme tanto y sin recordar tanto.....

Yo me tomo las manos delante de mi cintura, me quedo mirando hacia abajo pero me acerco, quedándome parada ahí hasta que me pasa la pequeña esfera de bronce; liberando un casi inaudible adiós antes de comenzar a caminar con aquel objeto entre esas manos de muñeca mías; mirándola un poco una última vez cuando llego a la puerta, tan cansada de llorar de pronto, con esa túnica ya tan agria en mi cuerpo, pero tan asustada también... No sabiendo esta si hará lo que dijo; enviar las cartas a las otras, buscar a aquella con la cual podría hablar...

.....Todo para dejar de extrañar, todo porque ahora empezaba a extrañaba tanto.....