-Escalera- This is who we are || Solaranielle Lych

El castillo se había llenado nuevamente. La gente estaba por todos lados. El terreno desde la ventana se veía lleno de vida, la gente iba y venia entre pequeños grupos. Más grandes que a principio pero más pequeños que los acostumbrados. No era de extrañar esto. Tantos no volvían, como su hermano que aun no decidía si rendir los extasis en Hogwarts o hacerlo en el ministerio directamente.

Se toco los labios, se le habían partido de tanto morderlos nerviosa. Debia hacer algo con eso. Aquí al menos estaba tranquilo, aunque debía irse tarde o temprano. Por eso comenzó a caminar escalera abajo, algo inquieta por la gente que podría cruzarse, reconociendo de momento solo una cabeza rubia.

-Am. hola, Solaranielle.

Estaba volviendo a mi sala común, después de una tarde de reparación, cuando escucho una voz que me llama. Deteniéndome observo a mis costados para ver quien me llamaba, y entonces levanto la vista para encontrarme con Lara en el camino. Le sonrío levemente, acercándome a ella.

-Hola Lara... - No sabia si estaba preocupada, o era solo su timidez. Nunca sabia cual era su estado de animo - ¿Estas bien?-

Era extraño verla en nuestro piso, en especial por que ella era una persona bastante tímida y le costaba acercarse a la gente.

-Si, estoy bien. - Sonrio calma, una de esas extrañas sonrisas sinceras que poseía y rara vez aparecia en su rostro entre los temblores nerviosos y la timidez natural que tenia a cuestas. Siempre había sido así de retraída, no era algo adquirido o algo que sorprendiera, Lara venía con la imagen de la timidez a cuestas desde antes de aprender a caminar.

-Estoy tratando de juntar valor. He... decidido llevar a cabo una resolución. De... de al menos hacer un nuevo amigo.- Admitió tragando pesado, frotando las manos contra la ropa en un intento de borrar las marcas del sudor de los dados. - Pero todos se conocen ya. Aun tengo algo de miedo. Pero es mi último año, voy a hacer las cosas diferentes. No voy a simplemente dejar que todo me pase por encima...

Al darse cuenta lo que dijo se sonrojó y bajó la cabeza rápido.

-Lo siento. No quería entretenerte con mis cosas. Son tonterías. Disculpa. como te fue esta semana?-

Me sonrío, se notaba que le costaba decirme lo que estaba diciendo. Era cierto que todos se conocían ya, pero nunca había suficiente tiempo para conocer a todos, y nunca estaba de mas conocer a una persona mas.

-Pues si, es cierto que todos se conocen ya, pero siempre se aceptan personas nuevas. No debes tener miedo, algunas personas son simpáticas...-

Le digo asintiendo ante lo que ella dice. Nunca teníamos que dejar que la vida nos pasara por encima.

-No te preocupes, no me molesta. Y nunca digas que son tonterías, lo que a ti te parece una tontería tal vez para el otro sea importante y yo no creo que sea una tontería lo que dices... - comento seria ahora - ¿Mi semana? Pues... creo que bien, mi cabeza esta en cualquier parte últimamente... ¿Que tal la tuya?-

-Lo. Lo siento.- No entiendo en que fallo. es una conversación sencilla, dos conocidas se sientan a hablar de la semana, solo trato de quitar peso de lo que me pasa, siempre trato de quitar peso, porque si no me pasa nada entonces nadie se debe preocupar, verdad? Para eso se usan esas frases que suenan ambiguas a mis oídos.

-Hago lo que puedo.- Admito bajo, entiendo lo que me dice, solo que no siempre mi lado lógico domina mi mente. Tratar de hacer conversación es difícil, solo esperaba que no se notara mi tono desesperado, que no se de cuenta la necesidad que tengo de esta simple conversación, de sentirme parte de este colegio y de dejar de ser solo una sombra, la sombra de Luke. Ser alguien cuesta demasiado, pero prometí mejorar. Quiero poder hablar con la gente. Pero como explicar la desesperación cuando te dan la espalda? El sentir que gritas y gritas y nadie te escucha.

-Aun no puedo ir a clase. Me esta tratando Madame Pomfrey por un problema de oido. Me reventaron los timpanos hace... - unos meses. -... am. aun estan sencibles pero esta semana me dijeron que tendre el alta para regresar a clase de forma normal. Estoy algo. emocionada de regresar a la normalidad.

Respiro profundo. Necesitaba calmarme, a veces decía las cosas tan seria que parecía que amenazaba a alguien. La transformación parcial me tenia un poco alterada.

-Lo siento, no quiero sonar brusca... a veces.... me sale... - Me avergüenzo - No quise decírtelo para que te sientas mal. Se que lo intentas, pero no debes quitarle valor a lo que sientas... Bueno pues mejor que no vayas a clases, tampoco te pierdes de nada extraordinario. Últimamente están bastante aburridas... - Me río - A la normalidad de Hogwarts querrás decir, que no es lo mismo que la normalidad en otros lados...-

-Esta bien. soy muy torpe para hablar. A veces no se como decir la palabra correcta. Espero no estes molesta.- sonrío tratando de borrar el corto mal entendido entre nosotras. Es mejor olvidar esas cosas. Porque si le doy demasiada vuelta pasara de un pensamiento a un tormento, no me gustan los tormentos, siempre trate de eludirlos aunque mis nervios nunca me permitieron hacerlo del todo.

-Es cierto. Desde que entre a Hogwarts jamas fue muy normal. Pero en Ravenclaw nos hemos enterado de poco. Todo siempre parece ocurrir o en slytherin o en gryffindor. A veces me siento completamente fuera de mi elemento en Hogwarts.

Me sonrío levemente. Era cierto, parecía que todo ocurría en esas dos casas. Tal vez por que los Slytherin siempre intentaban llamar la atención y los Gryffindor siempre intentaban demostrar su valentía.

-Bueno pues son casas ajetreadas, nunca tienes descanso... Demasiado jaleo, no puedes hacer nada en la sala común por que siempre hay algún agitador dentro... - Me río - Descuida no estoy molesta, te enteraras si lo estuviese, por que mi expresión se transforma por completo... Y si por ahí me pongo seria o algo no es por enojo, es solo seriedad...-

Suavemente sonrío, asintiendo con la cabeza lentamente sin saber que agregar a la conversación.
Siempre me he llevado bien con Solar, pero somos de mundos muy diferentes, la torre de gryffindor es un mundo aparte para mi y para los de las casas ajenas. Quiza es un mundo aparte cada sala comun, por eso todos estan bajo contraseña y tienen espacios apartados. Eso me preocupa en ocaciones cuando puedo pensar con claridad. Tanto se ha hablado de la unión del colegio y en realidad cada casa era un mundo diferente, tranquilamente podriamos todos vivir en nuestras casas y solo regresar por las clases.
-Esta bien. y no te preocupes, en ravenclaw tambien tenemos nuestros agitadores, aunque hoy dia nos faltan varios.- bajo los ojos. Por suerte los agitadores no se han enterado de mi existencia de momento.

Me sonrío, observando la escalera antes de sentarme en uno de los escalones y le hago señas para que se siente conmigo. No era tan cómodo como la sala común, pero iba a servir.

-Nosotros desde los gemelos Weasley no tenemos demasiados y ahora hay poca gente así que tampoco hay muchos. Pero lo bueno es que ahora todos nos estamos conociendo mas que antes, y eso es lo mas interesante de todo. Siempre es bueno conocer gente nueva... Y que sean de casas distintas no significa que no se pueda ser amigo de los demás. De hecho Luna, Isabelle y yo tenemos un club clandestino de pociones y ya ves, somos todas de casas distintas...-

Sonreí por lo bajo, asintiendo con algo de envidia. Yo no podría estar en un club de ningun tipo. Solo he estado en el de Gobstones y eso era porque mi hermano jugaba allí sino creo que jamás me hubiera atrevido. Me han ofrecido jugar o participar del Quidditch pero tengo miedo de no lograrlo, de que me miren y que el pánico me domine en la cancha de juego.
Pero así sola, si me encontraba con dos personas seguro hubiera entrado en pánico.
-Debe ser agradable, tener otras personas con quien compartir tus gustos.- Comento con una sonrisa algo más amplia. Siento la envidia de no poder hacerlo, pero es agradable saber que alguien más puede, que alguien más allí fuera puede disfrutar lo que yo no. Quizá es mi masoquismo innato o el deseo de hacer bien para el resto con la esperanza de vivir las alegrias a través de ellos, pero saber que había gente que se sentía feliz me llenaba el alma de una manera diferente, era calido y reconfortante.

Por unos momentos me quede pensando. Pues a veces era agradable y otras no tanto. Muchas veces prefería estar sola a tener demasiada gente que me pudiera tocar por accidente.

-Pues tiene sus ventajas y sus contras. A mi no me gusta estar rodeada de demasiada gente, así que a veces me siento un poco agobiada. ¿A ti no te gustan las pociones? Dime tus gustos, tal vez podamos encontrar algo para hacer...-

Le digo con una sonrisa.

No pude evitar que mis dedos se enredaran en una de mis ondulaciones, jugando con ella de forma ausente como para dispersar los pensamientos que me agobian. Hace rato pienso en que soy buena desde que ha salido el tema en una conversación con Edward.
- Sé bailar y toco el violonchelo. Soy de materias exactas la verdad. Entiendo la aritmancia, las runas y la alquimia. Pero las materias de instinto como las pociones o la herbologia no son lo mío. Y. creo que es todo. No soy muy buena en nada particular.

-Bueno pues mira, tenemos cosas en común. También me gusta la Aritmancia, las runas y la alquimia y yo toco la guitarra aunque no me pidas que baile por que terminaría enredada en mis pies... pero con eso podemos empezar a hacer algo. Podríamos juntarnos a tocar una tarde... ¿Que te parece?-

La herbología tampoco era demasiado lo mio, en cambio las demás materias si lo eran. Me gustaba aprender y todos los conocimientos abrían puertas nuevas, también todos esos conocimientos ayudaban a que la gente lograra conocerse.

-¿quieres tocar conmigo? - pregunto incredula. Y no es para menos si se tiene en cuenta que nunca había tocado para nadie mas que para mi padre, madre y mellizo. Entonces tocar con alguien.
No suena tan mal. Solo debo tomar valor. El valor que me falta congelada aqui con Solaranielle frente a mi esperando una respuesta a su propuesta. Lo único que se me ocurre es morderme el labio como siempre, ya comienza a sangrar de tanto que lo mordi el ultimo mes.
Quiero decir que no, quiero esconderme y proteger mi mundo, mi musica. La rubia está muy cerca de mi extraño y opaco mundo y temo que sea una amenaza. Es aterrador. Pero recuerdo porque estoy aquí observando de reojo la gente fuera. Si no acepto ahora es posible que no tenga otra oportunidad y por estas pequeñas oportunidades es que yo lucho día a día despues de todo.
-Si. Si. Claro. Me gustaría tocar contigo. Cuando gustes esta bien.

Podia oler su incomodidad prácticamente. Me mordí la lengua. Tenia la costumbre de ser demasiado directa algunas veces y no tuve en cuenta que ella me estaba diciendo que le costaba relacionarse con la gente.

-Claro que me gustaría, pero obviamente si tu quieres... no tienes por que sentirte obligada a hacerlo...-

Se lo había ofrecido, por que la música era liberadora, tal vez eso ayudara a que la barrera de vergüenza que ella tenia se rompiera un poco y pudiera relacionarse con mas facilidad.

-No molesta. No. Yo. Me gustaria. En serio... solo nadie me ha escuchado. Salvo mamá, papá y Luke. Pero eso porque tenia que practicar. - Traté de excusarme, de explicarme. Mis nervios son evidentes, pero no son por no querer, es solo que este año tratando de hacer las cosas diferentes me he dado cuenta que todo es nuevo. Es la primera vez que accedo a tcar para alguien más. Es la primera vez que hablo con un chico que no pertenezca a mi familia o tenga que ver con estudio. Todo es nuevo y me siento demasiado inexperta. Dispuesta a intentar, aterrada, pero dispuesta. Todo tiene cierto orden o lógica.
-Si. si quieres. Aunque solo tengo el violonchelo de momento.

Me sonrío al verla nerviosa. Yo también me había puesto igual cuando por primera vez me escucho alguien que no fuese yo misma, pero no era tan malo una vez que se hacia.

-Descuida, yo tengo la guitarra criolla así que podemos hacer algo solo de cuerdas ¿Te parece? Se que a veces es difícil o puede intimidar, pero la música conecta a mucha gente... y a veces rompe barreras... Aparte siempre podemos detenernos si te sientes incomoda y probarlo otro día...-

Comento tranquila. Quería que se sintiera a gusto y no presionada con tocar para otra persona. Pero si estaba segura de que la música iba a ayudarla un poco con su timidez.

-Suelo practicar en el lago o en la torre. Si quieres... podemos juntarnos tras la cena en alguno de los lugares.- Ofrezco con algo de pena, jugando con mis dedos frente a mi vientre como si no supiera en que emplearlos. Y es que no sé por donde comenzar ahora. Si, unas horas para tranquilizarme y preparar algo no esta mal. Es una buena idea para relajarme y no sentir que me estoy ahogando de pie.
-T-te parece o prefieres de otra forma?